10 características de los hombres dominados (betas)

10 características de los hombres dominados (betas)

Un hombre beta puede ser esencialmente identificado como un hombre común que no posee un sentido del valor propio, sin autoestima, del tipo que evita los riesgos y las confrontaciones, que permanece ante todo en su zona de confort. 

Generalmente se identifica al hombre beta por una falta de presencia, carisma y confianza en sí mismo, algo que se ven a niveles extremos en los hombres alfa. Aunque la mayoría de las mujeres sientan rechazo por los hombres beta debido a que trasmiten debilidad, por otro lado son perfectos para mujeres controladoras. 

Sí, las mujeres controladoras aman a los hombres beta, pues son altamente “útiles”, receptivos a sus dramas, adoran complacer y velar por los intereses de ellas. Son hombres fácilmente manipulables, se encuentran totalmente dominados y muchos con plena conciencia de ello.

A las controladoras no les gustan mucho los hombres alfas debido a su inclinación natural por el liderazgo, el dominio y el autocontrol, todo lo que ellas no quieren de un hombre. 

La intención de esta publicación es nada más que dar a conocer algunos de los comportamientos más comunes de los hombres beta, sin más preámbulos, dale un vistazo a 10 características que los hombres beta exhiben todo el tiempo. 
 
1. Siempre buscan la aprobación y atención femenina. 

Siempre procuran enfocar toda su atención para sí mismos, al punto de obsesionarse con lo que otros piensan de ellos y ponderando de forma exacerbada sus aptitudes en función del pensamiento ajeno. El hombre beta siempre está en busca de la aprobación de otras personas y constantemente intenta demostrar que está calificado, parece ser más importante lo que “esperan de él” que vivir según sus propios ideales. 

2. Falta de autoestima. 

Un hombre beta no tiene autoestima, justifica sus acciones para todos los que llegan a cuestionarle, siempre responde a las críticas y pasa a la defensiva de forma muy sencilla cuando se siente presionado. 
 
3. Apariencia débil.

Una apariencia que indica sumision. Un hombre beta luce muchas veces confuso y mal alineado. Tiende a tomar una postura rígida y con frecuencia parece no saber lo que está haciendo. Transpira inseguridad y flaqueza. Difícilmente consigue mirar a alguien a los ojos, siendo fácilmente intimidable tanto por hombres como por mujeres. Cuando le dirigen la mirada este aparta la suya. Las típicas actitudes serviles. 
 
4. Tonto con las mujeres. 

El beta se revolcará en el fango para complacer y agradar a una mujer y muchas veces a sabiendas de que está siendo utilizada o ignorada. Un beta siempre parece desesperado y está dispuesto a someterse como esclavo y comprometerse con una mujer apenas ella le dé luz verde. Entonces, su vida gira en torno a ella, si la pierde o se va, el prácticamente se queda sin nada, pues cree que no puede vivir sin ella. Además de eso, adora halagarla, siempre que le sea posible intenta complacerla con halagos, chucherías y regalos. 
 
5. Tienen ideas negativas sobre la vida. 

Los betas constantemente son irritantes, pues casi siempre están reclamando y quejándose de todas las situaciones negativas. Tienen dificultad en ver el lado positivo de todo. Nada es bueno y nunca lo será para ellos, pues el problema no es sólo reclamar lo que está mal, sino que les falta el valor para tomar acción y cambiar su realidad. Se resignan y nada los impulsa a cambiar esto. 

6. Evitan asumir riesgos. 

Un beta puede tener un sueño o un objetivo en la vida, pero automáticamente busca todas las consecuencias negativas en detrimento de sus acciones para la realización del sueño u objetivo, evitando así asumir riesgos necesarios y saludables para el crecimiento personal, de este modo prefiere permanecer estancado dentro de su “burbuja”, donde nada ni nadie resulta peligroso. 
 
7. Evita el conflicto a toda costa. 

El beta está dispuesto ocasionalmente, a debatir con otra persona sólo cuando resulta extremadamente necesario. Evita el conflicto a toda costa gracias a su letárgica flojera. El beta también estará de acuerdo con los demás, incluso aunque crea que están en un error, sólo para agradarles. Se vende barato para cualquier causa, entregan sus valores y los cambian según las necesidades. 
 
8. Fobia social y timidez. 

En el beta existe un odio a su propio reflejo en el espejo. Con frecuencia se siente nervioso e incapaz de mantener una conversación, evita el contacto visual con las personas y parece que siempre tiene prisa por ir y volver de un lugar. No se siente bien en lugares a los que no acostumbra a ir regularmente. Es incapaz de interactuar de forma dinámica con mujeres desconocidas, hay una renuencia constante en abordarlas aunque un deseo desbordante de servirlas y complacerlas.
 
9. Permiten a las mujeres decidir por ellos. 

Los betas no están dispuestos a tomar sus propias decisiones y permiten que otros las tomen por ellos. Un beta siempre está indeciso sobre las cosas, espera por una dirección y que alguien asuma el liderazgo y sugiera una acción. Cuando una mujer le ofrece un poco de atención, este se desespera y se torna extremadamente agradable pasando a ser visto como un tipo “buena onda”, de esos que siempre caen en la friendzone, hasta que agotan sus esperanzan y hacen su movimiento desesperado para terminar siendo rechazados. Cuando eso sucede en lugar de mostrar un poco de valor y retirarse, comienzan a lamentarse y preguntar a la mujer porqué los rechaza, ella se niega a responder y continúan tras ella, esto se vuelve un suplicio para ellos y pasa a perseguirla. 

10. Espera el permiso de las mujeres.

El papel pasivo y subordinado de este tipo de hombre en una relación puede llevar a la mujer a un estado de enojo, pues él no tiene iniciativa y mucho menos decisión ni opinión propia, dos cosas que la mayoría de las mujeres esperan del hombre. Él prefiere esperar para comenzar cualquier cosa, ya que si ella no lo aprueba nada camina en la relación. Él sigue de forma religiosa una cartilla de reglas establecida por ella tal como un esclavo sirve a su dueño. Evita a toda costa todo lo que pueda hacerla sentir mal.

¿Te identificas con alguno de estos puntos? Algunos en el pasado tuvimos un poco de estas características. Sólo basta con tomar la red pill que te permitirá revertir estas actitudes negativas y antes de que te des cuenta, te convertirás en un gran alfa dominante que no permitirá ser monigote manipulable por las mujeres.